Dentro del sector inmobiliario, ponemos el foco en la compra y reposicionamiento de toda clase de activos. Nuestra idea es siempre la de añadir valor contemplando el escenario de la posterior venta o el mantenimiento del activo para su alquiler.

En la mayoría de nuestras participadas nuestro papel es puramente financiero, delegando la gestión en un fuerte equipo con grandes conocimientos del sector y una dilatada experiencia. Es importante que en cada proyecto estén bien diferenciadas las figuras, estratégica y de gestión de costes. Consideramos fundamental que las empresas tengan muy claro donde quieren llegar, pero es vital que lo hagan de forma ordenada, controlando muy bien los procesos y sin asumir riesgos excesivos en el plano económico.

Todas las empresas de nueva creación en las que invertimos tienen cuatro factores en común; se encuentran en fases iniciales, cuentan con un management joven pero sólido, tienen una oferta de producto disruptiva dentro de un mercado concreto y un punto de peligrosidad elevado de cara a sus competidores.

En materia de activos financieros llevamos a cabo una gestión pasiva de las carteras consistentes en su mayoría en fondos de inversión con una estrategia long-only y una visión value. Para seleccionar los fondos de inversión nos basamos en el alpha que ha generado el gestor con respecto a su índice de referencia. Buscamos el mejor para cada sector y área geográfica. Todas nuestras inversiones en activos financieros son liquidables D+2